TOP OF THE LAKE es una inquietante miniserie co-escrita y co-dirigida por Jean Campion (la directora de “El Piano”) y localizada en unos exóticos parajes naturales de Nueva Zelanda. Se trata de una coproducción entre los canales UKTV de Australia/Nueva Zelanda, la BBC y el Sundance Channel. Por tanto su nacionalidad sería australo-neozelandesa-británico-estadounidense… Una mezcla de nacionalidades para una serie que a su vez contiene una buena amalgama de géneros para conseguir ser sobre todo eso con lo que la calificaba en el primer adjetivo utilizado para referirme a ella: inquietante.
THE VILLAGE. Otra estupenda serie de la BBC.
Hoy vamos a hablar de una serie inglesa que centrada en una familia típicamente británica y justo antes de la Primera Guerra Mundial, narra de forma coral las vicisitudes y relaciones entre personajes de las distintas clases sociales que conviven en la misma villa a lo largo de los años… un momento… esto suena muy familiar… ¿Downton Abbey?… ¡No!: THE VILLAGE.
DEREK. El corazoncito de Ricky Gervais
DEREK es la última serie de Ricky Gervais y siendo posiblemente la más normal y sin duda la menos freakie de todas las que ha hecho hasta la fecha, es una de las que más opiniones polémicas ha causado pues curiosamente ha sido la más criticada por muchos de sus fans, y la más alabada por sus anteriores detractores…
Es una serie que aparentemente poca gente podía esperar del autor de «The Office» o «Life’s too Short» y que consecuentemente ha dejado bastante despistados a aquellos que apreciaban sobre todo ese humor brutalmente cruel y políticamente incorrecto que hasta ahora era la marca de la casa. En este caso, Ricky Gervais se ha descolgado con una tierna comedia que invita más a la sensiblería que a la risa y donde desde luego, yo he cumplido con nota pues me ha conmovido igual o más que divertido… Y sí, tengo que reconocer que soy de lágrima fácil, pero también que Gervais desde el primer momento se marca como principal objetivo buscar la lagrimita del espectador aglutinando en los 30 minutos de cada episodio todas las triquiñuelas y golpes bajos sentimentales que se le ocurren. Incluyendo una banda sonora con melodramática música de piano y hasta alguna balada de Coldplay.
Ricky Gervais juega con fuego porque es muy difícil mantener ese tono sentimental sin caer en el ridículo, mantener el tono humorístico sin caer en la burla de algo tan serio como en este caso es la vida de unos ancianos que pasan sus últimos días en una residencia y a la vez denunciar una situación sin caer en la demagogia. Pero Gervais es muy grande y sale gloriosamente triunfante y con nota en la más arriesgada y valiente de sus series, donde por cierto, demuestra que es además un gran actor.
Algunos fans del Ricky Gervais más salvaje han acusado a DEREK de ser una serie ñoña y sensiblera. Igual no les falta algo de razón. Aunque también algunos acusaban a Frank Capra de ñoño y sensiblero…
Y es que Ricky Gervais no es Frank Capra (todavía…), pero desde aquí proclamo a los cuatro vientos que DEREK es una serie maravillosa y deliciosa que nadie debería dejar de ver.
by joseluis garcés
(publicado en INDIANAzine)
PUBLIC ENEMIES. Un discutible final para una gran miniserie.
PUBLIC ENEMIES es una más que interesante miniserie de la BBC.
Y ahí podría terminar mi comentario. Con eso debería bastar para cumplir el objetivo que pretendo con estos artículos del blog: recomendar series que no deberían pasar desapercibidas a los buenos degustadores de la mejor cinematografía televisiva. Poco se puede añadir como recomendación a la susodicha frase, que incluso dentro de su brevedad podría ser considerada redundante al utilizar el adjetivo «interesante» referido a la BBC… Quizás comentar algunos detalles sobre de qué va la serie y es este caso particular mencionar un «pero» que a mi juicio deja en sobresaliente lo que pudiera haber sido de matrícula de honor…
Empecemos hablando de la historia: PUBLIC ENEMIES es una miniserie de tres episodios que cuenta la historia de un ex-convicto, Eddie Mottram que sale en libertad condicional tras 10 años en prisión por el asesinato de su novia cuando apenas era un adolescente. La agente de la condicional Paula Radnor, que es encargada de supervisar y dirigir su reinserción, precisamente acaba de reincorporarse a su puesto tras una suspensión por una serie de errores que permitieron que otro ex-convicto bajo su tutela volviera a matar. Este precedente hace, que decidida a que no le vuelva a ocurrir lo mismo, se muestre especialmente dura con la reinserción de Eddie.
El guión (hasta los últimos 5 minutos… luego hablaremos de esto…) es magnífico y las interpretaciones memorables, consiguiendo una intensidad y un realismo casi documental donde aparecen muchos temas susceptibles de debate sobre el sistema judicial, el penal, la actitud de la sociedad hacia los ex-convictos, etc. Lo bueno es que durante toda la serie, no se percibe adoctrinamiento ni una clara toma de postura hacia los personajes. Toda la historia discurre en un clima de ambigüedad moral que la hace más interesante en sus incertidumbres. Lo malo es que todo eso sucede hasta justo 5 minutos antes del final…
El ‘pero’ que mencionaba antes, es que en los últimos minutos y de manera un tanto precipitada, se busca un cierre a la historia, que a mi juicio no hacía falta. Debo confesar que me cabrearon bastante esos 5 minutos finales que parecen destinados a contentar al público que busca que todo quede atadito y respondido al final de una historia. Casi siempre lo sugerido tiene mucha más fuerza que lo afirmado y en este caso una historia que podría haber crecido en su final dejando muchas cosas sugeridas, se hace más pequeña al comprimirla con un innecesario cierre.
Pero también es cierto que esos pocos minutos no deberían restar valor a una serie magnífica en su conjunto.
WALLANDER: el lado oscuro del estado del bienestar
Llevaba tiempo pensando en escribir algo para recomendar esta serie, pero como siempre, el día a día y mi pereza para la escritura lo han ido retrasando… Pero ahora que acabo de comprobar que la BBC está emitiendo la tercera temporada, se me han avivado las ganas de ver los nuevos episodios y a la vez escribir la correspondiente entrada de recomendación en mi humilde blog.
Acabo por cierto, de darme cuenta que curiosamente y sin ninguna intención previa por mi parte, todas las series que llevo recomendadas en el blog son inglesas. Lo que es tanto más curioso cuando realmente dedico más tiempo a ver series americanas… Aunque claro, en este caso el mayor tiempo no necesariamente implica un mayor número de series, porque el factor duración es importante y las inglesas no suelen superar los 6 u 8 episodios. Eso las «largas» porque abundan las miniseries de 3 ó 4 episodios.
Wallander es una de esas miniseries de 3 episodios por temporada, pero con una diferencia fundamental hablando de duración: los episodios duran 90 minutos. Es decir duración cinematográfica habitual. Bueno, habitual antes, porque ahora la duración ha pasado a formar parte de la ostentación presupuestaria y parece cutre que una peli dure menos de dos horas.
Pero bueno, volviendo a la serie que nos ocupa, Wallander es la adaptación por la BBC de las novelas del escritor sueco Henning Mankell basadas en su detective Kurt Wallander al que da vida en la serie como protagonista indiscutible Kenneth Brannagh. Cada episodio corresponde a una novela y con la tercera temporada en emisión, ya son 9 las adaptadas. Creo que se ha anunciado una cuarta temporada que será la última, entre otras cosas, porque ya no quedarán novelas que adaptar… Como cada episodio es un libro, pueden verse independientes. De hecho más que una serie de televisión al uso, se podría ver como una franquicia de películas sobre el personaje. El único arco argumental que las une es la vida personal de Wallander y sus compañeros.
Vaya por delante que no he leído ninguna de las novelas de Mankell por lo que no puedo hablar de la fidelidad de las adaptaciones. Me consta que algunos fans de las novelas han criticado el trabajo de Brannagh por alejarse del personaje en papel. Pero para mí, fuera de toda comparación, el trabajo de Brannagh es magnífico. Como es magnífica toda la serie. Una serie de ambiente frío, distante y triste que refleja ese otro lado oscuro del supuesto paraiso sueco. Estamos hablando de una serie de la BBC y además de alto presupuesto, con lo que todo está cuidado incluso por encima del nivel al que nos tiene acostumbrado la cadena británica. A destacar la esmerada fotografía llena de paisajes bonitos pero desolados, fiel reflejo de la sociedad que Mankell quiere mostrarnos.
Kurt Wallander es un policía de homicidios, un antihéroe con problemas afectivos y familiares que simplemente intenta hacer su trabajo pero que no puede evitar implicarse emocionalmente en los casos que investiga. Y sobre todo no puede evitar sentirse asqueado ante todo ese lado oscuro que se ve obligado a sacar a la luz de la aparentemente plácida sociedad que le rodea. Y es esa fragilidad emocional unida a su incapacidad para las relaciones personales lo que hace de Wallander un tipo entregado a su trabajo.
Wallander es en esencia puro cine negro clásico, pero con un ‘look’ distinto y cautivador.
Imprescindible.