Resulta verdaderamente difícil no sentirse identificado con un tipo como el columnista deportivo Giles Smith. Aunque no es precisamente esa faceta de su poliédrico perfil biográfico la que más nos interesa, si no, más bien, su condición de infectado por el dulce y bendito veneno de la música pop.
Reputado comentarista deportivo (escribe habitualmente en “The Times”, entre otros medios, y fue reconocido como “periodista del año” en 1998), Smith es un refinado degustador de manjares melódicos y tiene un atractivo pasado como miembro de un par de bandas de nula trascendencia y de otra que podría haber llegado algo más lejos pero que finalmente se convirtió en estereotípico ejemplo de banda de culto: los formidables y sugerentes Cleaners From Venus.
Además de vivir la música de una forma enternecedoramente apasionada, Giles Smith sabe contar esa estrecha y benefactora relación con enorme agudeza, contagioso entusiasmo y fino sentido del humor.
Veinte años después de su publicación original en Inglaterra, el pasado año se editaba por primera vez en España esta pequeña joya de literatura amable, chispeante, también emotiva y, en cualquier caso, enormemente reconfortante en la modestia de sus pretensiones.
A lo largo de las poco más de trescientas jugosísimas páginas de “Lost In Music”, su protagonista esboza una sucesión de sugerentes pinceladas autobiográficas de un chavalín con serias aspiraciones de ser una estrella del pop que se las va apañando con una versión ciertamente menor de esa vida soñada.
Pero más que sus anecdóticas vivencias en el seno de Orphans of Babylon o Cleaners From Venus, lo verdaderamente consistente del libro son esas reflexiones llenas de ingenio sobre el significado de la música y su definitiva influencia en la trayectoria vital de sus adoradores.
by Pablo Carrero