La primera temporada de HANNIBAL ha sido la última serie que he podido disfrutar justo antes de acabar el año. Una serie sobre un exquisito gourmet asesino de gustos antopofágicos que hace sus pinitos como chef utilizando los despojos de sus víctimas. Para un gran amante de los platos de casquería como yo, ha sido un entrañable aperitivo de cara a las suculentas comidas navideñas…
La serie se centra en el personaje de Hannibal Lecter, creado por Thomas Harris y mundialmente popularizado por el gran Anthony Hopkins en la versión cinematográfica de ‘El silencio de los corderos’, segunda de las tres novelas de Harris protagonizadas por el inteligente y manipulador psquiatra asesino que gusta de disfrutar gastronómicamente de sus víctimas. Mi conocimiento previo del personaje no alcanzaba más allá de la famosa película de Jonathan Demme, pero parece ser que la serie comienza como una precuela de la primera novela ‘The Red Dragon’ con muchos de los personajes de la misma.
Sin entrar en detalles del psicótico y delirante argumento, lo primero que sorprende de HANNIBAL es que no se trata de una producción de una cadena de cable, sino de la todopoderosa y generalista NBC. Y es que a pesar del formato visualmente preciosista y elegante, la serie contiene algunas de las escenas con más violencia gore que se hayan podido ver en TV. Eso sí: sin sexo.
Creo que HANNIBAL tiene el honor de ser la serie que más confusos sentimientos me ha generado en toda mi vida. Tanto es así, que tras visionar los 13 episodios de la primera temporada, todavía no sé si me gusta o no.
Extraña, inverosímil, inquietante, aberrante, alucinante, irritante, sorprendente, bestial, soporífera, elegante, adictiva, sonrojante, confusa, desconcertante, artificiosa, impresionante, asombrosa, ambigua, incomprensible… todos esos calificativos han pasado por mi cabeza en algún momento durante el visionado de la serie. Quizás por ello, habría uno que en cualquier caso se podría antojar como conclusivo: INTERESANTE.
A falta de mayor asertividad en la valoración de la serie, lo único que puedo decir es que a medida que pasan los días, en mi mente van aumentando las posibilidades de que le dé una oportunidad a la segunda temporada que ya ha sido emitida a ver si mi confusión se va dirimiendo…
by joseluis garcés